Crónica de una victoria anunciada.

Cuando estudias periodismo, y formas parte de un medio como pueda ser este periódico lo haces por este tipo de cosas. Martes 26 de Octubre, hoy no va a ser un día cualquiera, hoy cubro la crónica del Soldado.

 El partido comienza, y a pesar de que el Soldado jugaba fuera, la balanza ya se inclinaba hacia el lado del miembro en la grada. Numerosas voces, la mayoría femeninas, clamaban al aire su deseo de ver por fin a la gran máquina engrasada y carburar.

 En una genialidad del 14 y cabeza del equipo, Delsanz, el Soldado Miembro salió con un 3-1 presionando en medio campo, lo que desorientó por completo a una Real Suciedad que acumuló en los 3 primeros minutos más pérdidas que todas las que acumularía el Soldado.

 Estaba claro que el gol era cuestión de tiempo, y en un barullo pasado el medio campo, Chewy manda un balón a tierra de nadie, dónde aparece Dieks para controlar y con suavidad marcar el primer gol de la temporada, el soldado comenzaba a jugar en campeón.

 El primer gol no cegó al Soldado que siguió hilvanando fútbol de gran calidad, y gozando de grandes ocasiones de gol, consiguiendo el dorsal 17 Carlos Heras, los aplausos del público a falta de 6 min para el descanso, en una jugada que solo el destino quiso que no acabara dentro.

 Una mirada por parte de los jugadores del Soldado, sirvió para hacer saber que había que apretar el acelerador, y fue entonces cuando Chewy robó un balón en la medular, se deshizo de un defensa y forjó el 2-0. Inmediatamente después con la Real volcada, Delsanz sacó la escuadra y el cartabón y diseñó el gol perfecto materializado por Barry a pase de Víctor, se llegaba de esa manera al descanso.

 En la segunda parte el partido cambió, pero aunque la Real saliera con todo, a veces al límite de la legalidad, una jugada de estrategia acabó con el segundo gol de Dieks y la puntilla para la Real. Fue entonces cuando el Soldado se relajó y encajó un gol a balón parado, que por otra parte fue al límite del reglamento.

Pero guiados por la voz de un Delsanz enchufadísimo, a pesar que el árbitro intentase coartarlo, y por la experiencia y el tempo que desde Canarias trajo el capitán Casta, el Soldado no se dejó amedrentar. Y por si fuera poco dos paradones espectaculares del portero Nacho, sellaron el partido ,que en los últimos minutos pudo ser más miembro todavía con ocasiones de Chewy, Dieks, y Díaz-Rullo, sin podernos olvidar por supuesto de la escuadra que aún sigue templando después de un trallazo a balón parado de Delsanz, que disparó con la fuerza de toda Soria, con ese guante que  tiene por pie derecho.

 Así se daba fin, a un debut soñado, que acabaría con una conversación muy civilizada con el árbitro y unas fotos para hacer eterno, el partido con el que empieza una nueva leyenda llamada Soldado Miembro F.C.

Apéndice:  Algunas malas lenguas  afirman haber visto al soldado hasta altas horas de la noche bebiendo cerveza, y cantando canciones de Sabina con su Relaciones Públicas y dos personas sin identificar. Incluso hay bocas que señalan que uno de los jugadores pudo pasar parte de la tarde con una directiva del equipo. Pues sin poder afirmarlo ni desmentirlo, si es así MERECIDO SE LO TIENEN.